Robots emocionales, Marina Muñoz ducadora con especialización en Neuroeducación y experiencia en Educación Infantil, comparte sus reflexiones sobre la inclusión de la robótica educativa en entornos de aprendizaje para niños con necesidades educativas especiales. En este artículo reciente, Muñoz explora la razón detrás de la incorporación de robots emocionales en las aulas que atienden a niños con Trastorno del Espectro Autista (TEA) y ofrece ejemplos concretos.
El desafío que enfrentamos como educadores en las aulas, tanto en lo personal como en lo profesional, se intensifica cuando nuestros alumnos presentan el TEA. Este trastorno afecta una variedad de funciones psicológicas, incluida la habilidad para establecer conexiones sociales, comunicarse efectivamente y expresar empatía a través de intercambios emocionales. La singularidad de cada estudiante complica aún más la tarea de desarrollar estrategias educativas que sean genuinamente efectivas para aquellos diagnosticados con TEA.
“Estos androides emocionales están ideados para colaborar con niños que enfrentan el autismo y potenciar el proceso de evaluación,” mencionó María Muñoz.
Tipos de robots emocionales:
NAO:
Se destaca como el robot humanoide más adecuado para colaborar con niños que presentan autismo, gracias a su conjunto de juegos y aplicaciones diseñados para la interacción en el entorno educativo. Nao posee habilidades de baile, canto, conversación y juego, todo respaldado por una serie de recursos tecnológicos como sensores, cámaras, sintetizador de voz, micrófonos y luces LED.
PLEO:
Con una apariencia similar a la de un dinosaurio, Pleo se presenta como un robot mascota que destaca por su impresionante capacidad para interactuar. Cabe señalar que estos robots no son uniformes, ya que se presentan en diversas combinaciones que los hacen más juguetones en algunos casos y, por ejemplo, más sosegados en otros. Los estudiantes tendrán la oportunidad de disfrutar mientras juegan y, al mismo tiempo, aprenderán a interactuar con Pleo mientras cuidan de su propia mascota robótica.
NUKA:
Con un diseño que se asemeja a un peluche de aspecto entrañable, este robot con forma de foca ha sido creado con el propósito de colaborar con niños que tienen requerimientos particulares. Su enfoque se centra en fomentar la interacción humana al expresar emociones a través de sonidos, movimientos y gestos, lo que lo convierte en una herramienta especializada en este ámbito.
LEKA:
Un robot sumamente intrigante, que está en proceso de búsqueda de respaldo económico, es conocido como Leka. Su diseño sensorial adopta una forma esférica que facilita la interacción del niño a través de la combinación de colores, movimientos y sonidos. Además, es adaptable a las necesidades individuales de cada niño y ofrece una variedad de juegos diarios incorporando pictogramas como parte de su propuesta.
Estos son varios ejemplos de robots actualmente en uso (cada vez más comunes en las aulas) que han sido creados con el propósito de colaborar con niños que tienen autismo y realzar su proceso de diagnóstico.
Esperanza para el Autismo:
El autismo es una expresión única de la diversidad humana. Las personas con autismo enfrentan desafíos en su comunicación y conexiones sociales. Aquí es donde las nuevas tecnologías han demostrado ser un faro de esperanza. Los robots diseñados con sensibilidad y empatía están iluminando el camino hacia una vida más plena para estos niños.
Estos robots actúan como compañeros comprensivos, brindando apoyo y estructura en un mundo que a veces puede resultar abrumador. Con paciencia inquebrantable, ayudan a los niños a desarrollar habilidades sociales y a aprender de manera divertida y atractiva. Lo que es aún más maravilloso es que estos robots pueden adaptarse a las necesidades individuales, brindando una ayuda personalizada que antes parecía inalcanzable.
Las nuevas tecnologías nos recuerdan que la compasión y la innovación pueden ir de la mano. Estos robots no solo ofrecen herramientas prácticas, sino que también fomentan una mayor comprensión y aceptación de las diferencias. Estamos presenciando cómo la tecnología puede transformar vidas y abrir puertas a un futuro más inclusivo y amable para todos.
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