INSOMNIO
El insomnio deriva de la dificultad para iniciar y/o mantener el sueño, o la sensación de no haber dormido un sueño reparador. Por lo que presenta un problema de disminución de la cantidad y/o calidad del sueño.
Este trastorno del sueño se da en una tercera parte de la población (30%), siendo más usual en los ancianos, las mujeres y en personas con enfermedades psiquiátricas. La mayoría de los casos de insomnio tienen un inicio agudo, coincidiendo con situaciones de estrés, y tienden a cronificarse, es decir a volverse crónico en el 60 % de los casos.
El sueño es fundamental para el buen estado físico y mental de las personas.
Cuando una persona duerme mal durante cierto tiempo se producen alteraciones físicas y mentales que pueden originar una enfermedad.
¿Cuáles son los síntomas del insomnio?
El insomnio influye en el estado vigil, es decir, el estado del que está despierto o en vela en las horas en que se suele dormir , por lo que la persona tiende a tener disminución de la concentración, falta de energía física y alteraciones del comportamiento y de las emociones (irritabilidad), que afectan de modo importante en su calidad de vida.
Los síntomas más habituales son:
- Disminución de la concentración.
- Falta de energía física.
- Alteraciones del comportamiento.
¿Cuáles son las causas del insomnio?
Existen múltiples causas del insomnio. Unas son frecuentes y otras raras, unas se deben a influjos ambientales y otras a trastornos del individuo, unas son de origen psiquiátrico o psicológico y otras orgánicas, unas son pasajeras y otras son crónicas.
Las causas más frecuentes de insomnio son las alteraciones emocionales y las enfermedades psiquiátricas. En general, todas aquellas situaciones del individuo que se acompañan de intensa ansiedad, preocupación, tensión psíquica, angustia, miedo o tristeza. Estos insomnios tienden a cronificarse.
En segundo lugar están aquellas enfermedades o malestares de origen físico, que no le permiten la relajación previa al sueño o le despierta varias veces durante la noche: enfermedades que producen dolores, fiebre, sensaciones físicas como las parestesias, picores, hormigueos, etc.
En tercer lugar están los insomnios relacionados con la toma de sustancias como el café, refrescos de cola, chocolate, etc, tomados por la tarde-noche pueden producir insomnio de conciliación. El alcohol produce alteraciones del sueño con insomnio de mantenimiento (frecuentes despertares) y sueño superficial. Las personas que toman estimulantes, legales o ilegales, o los que abusan de sustancias tranquilizantes, pueden presentar insomnio también como efecto de la abstinencia de esas sustancias.
En cuarto lugar están las causas por circunstancias ambientales: ruidos, calor, olores, dureza del colchón, etc.
¿Quién puede padecerlo?
Este trastorno del sueño se da en una tercera parte de la población (30%), usualmente a los ancianos, a las mujeres y en personas con enfermedades psiquiátricas.
La mayoría de los casos de insomnio tienen un inicio agudo, coincidiendo con situaciones de estrés, y tienden a cronificarse en el 60 % de los casos debido a factores comportamentales (mala higiene del sueño) y cognitivos (ideas y temores a no dormirse) desarrollados por el episodio de insomnio.
¿Cuántas horas es normal dormir?
Esto depende de la edad, la estructura y el tiempo de sueño varían. Por lo que generalmente el recién nacido duerme aproximadamente unas dieciocho horas, un adulto joven una media de siete-ocho horas, un anciano alrededor de seis horas y media.
En la clínica de Ker Clinic podemos ayudarte a este padecimiento.